En una tarde-noche caliente, disputada y no tan bien dirigida por el arbitro Néstor Pitana, Boca venció a River por 2 a 1 en el Monumental y es más líder que nunca.
El encuentro comenzó con un local superior que se hacia dueño de la pelota e intentaba acorralar a su rival, con una recuperación en campo ajeno y construcciones rápidas de cara al arco rival. Iban 13 minutos cuando, la visita comenzó a salir del fondo de la mano de un extraordinario Pablo Pérez, sin embargo solo sería un respiro antes de sufrir un nuevo asedio que duró casi 15 minutos. Llamativamente fue Ignacio Fernández, mediante una plancha absurda e innecesaria, quien ayudó a su rival a salir de esa dura situación. La consecuencia de esa infantil reacción fue la roja y un peligroso tiro libre para su eterno rival, en una de las pocas buenas acciones del arbitro.
Edwin Cardona que ya había tenido dos tiros libres, no perdonó y en la tercera que tuvo concretó la apertura del marcador. El gol fue una verdadera obra de arte, sacada del "Manual de los Tiro Libres", con potencia, comba de afuera para adentro y al angulo mismo del arquero Germán Lux que nada pudo hacer. Los pocos minutos que le quedaban al primer tiempo fueron algo desordenados en comparación con el resto de esa etapa, dando la sensación de un River abatido y un Boca relajado.
Ya en la segunda mitad, los de Marcelo Gallardo volvieron a tomar el control del encuentro desde el saque inicial, más aún tras la injusta expulsión de Cardona cuando iban 15 minutos. Ante esto los Xeneizes se reforzaron en el fondo y comenzaron a buscar ampliar el marcador mediante contras rápidas, aprovechando el gran pie de Pérez y la velocidad de Cristian Pavón o los laterales.
Sin embargo cuando se complicaba entrar, un estupendo disparo desde fuera del área, de Leonardo Ponzio, empató el encuentro y llevó la incertidumbre a todos los espectadores. Pero la alegría no duró mucho y solo 4 minutos después del empate parcial llegó el definitivo 2-1, nuevamente cuando peor estaban los de Guillermo Barros Schelotto. El gol fue obra de Nahitan Nández, tras un estupendo pase de Pablo Pérez y una floja respuesta del arquero Lux.
Tras el segundo tanto de la visita, el partido estuvo lleno de posibilidades de ampliar el marcador, incluso hubo un gol mal anulado a los Millonarios, que hubiera significado el 2 a 2. Por su parte los Xeneizes desperdiciaron muchas chances claras de ampliar las diferencias en varías claras contras muy mal concluidas.
Con este resultado Boca, que en la próxima fecha enfrentará a Racing, sigue primero con puntero con puntaje perfecto. Mientras que River sigue en descenso e intentará comenzar a remontar a partir de la próxima jornada cuando enfrente a Independiente.