Por definición, los jueves podrían ser los días más atractivos de la NBA por los partidos que se programan para dichos días. Esta vez, Houston Rockets ganó un duro partido a San Antonio Spurs en el choque más atrapante.

James Harden jugaba tras su histórica actuación donde logró un triple-doble con 60 puntos, y tuvo otro gran rendimiento sin tener esos históricos números. Metió 28 puntos y repartió 11 asistencias, para ser el máximo goleador del encuentro. Gerald Green (15) y Clint Capela (14) también aportaron a la victoria.

Por el lado de los Spurs, el 2º puesto del Oeste queda cada vez más lejos y parece que serán los Rockets quienes pelearán por la cima de la tabla contra Golden State Warriors. Danny Green metió 22 puntos y LaMarcus Aldridge 16 para San Antonio ayer, mientras que Emanuel Ginóbili jugó 20 minutos y sólo pudo contribuir con 5 puntos y 3 asistencias, y le tocó marcar a Harden por momentos pero sin buenos resultados.

Por primera vez, Blake Griffin jugó para Detroit Pistons luego de confirmarse su traspaso a la franquicia. No lo hizo mal: 24 puntos y 10 rebotes ilusionan con cambiar el rumbo que los tienen fuera de puestos de Playoffs en el Este. Lo cierto es que ayer los Pistons le ganaron 104-102 a Memphis Grizzlies y ahora quieren comenzar a subir posiciones.

El tiro de la noche estuvo en el duelo entre dos rivales de la división Noroeste. Denver Nuggets le ganó 127-124 a Oklahoma City Thunder con un triple sobre la bocina de Gary Harris, el héroe del 8º del Oeste. El escolta metió 25 puntos en total, pero otros dos se lucieron más en la planilla de estadísticas: Nikola Jokic terminó con su 3º triple doble de la temporada (29 puntos, 13 rebotes y 14 asistencias), y Jamal Murray lideró a Denver anotando 33. Del otro lado, Paul George, que había empatado el partido a segundos del final, hizo 43 con un altísimo 73% en tiros de campo.

Otros resultados:

Toronto Raptors 119-122 Washington Wizards
Milwaukee Bucks 89-108 Minnesota Timberwolves