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Racing ganó el duelo de las rojas
Las emociones -de todo tipo- no faltaron en Avellaneda. Racing derrotó 2-1 a Vélez con goles de Lautaro Martínez y Ricardo Centurión, en un partido que tuvo además 2 expulsados por bando. Mauro Zárate había marcado el empate transitorio.
Los planes de los entrenadores se alteraron rápidamente. Ya a los 5 minutos, Nery Cardozo tiró un córner que encontró sólo a Martínez, y el delantero cabeceó esquinado para adelantar a la Academia en el marcador. Pese al gran arranque del jugador del momento del local, la figura lentamente sería Juan Musso, el arquero.
Firme y consistente, Musso fue apagando situaciones de gol del rival. Le atajó un par de tiros a Zárate en la etapa inicial, así como un potente cabezazo de Fabián Cubero y un tiro bajo y esquinado de Matías Vargas. Sin embargo, no llegaría al 100% de efectividad.
Cuando en el complemento Racing parecía estar dispuesto a retomar el control, Vargas ubicó con un gran centro la cabeza de Zárate, y el delantero puso el empate batiendo la resistencia de un arquero que incluso casi logra forzar un córner. Nicolás Domínguez casi pone el segundo minutos después, pero serían las rojas lo que desvirtuaría el encuentro.
Una pelota peleada por Lisandro López y Hernán De La Fuente derivó en que el 9 le tirara una patada sin pelota al defensor que estaba en el piso. La reacción estuvo lejos de ser otra agresión de ese estilo, aunque fue con bronca. Y por eso Patricio Loustau decidió echar a los dos. Posterior a eso, Centurión aprovechó una de las pocas situaciones de peligro que se dieron con ambos conjuntos ya fijandose más en el arbitraje, y pudo poner el 2-1 de cabeza.
Después de una enorme atajada de Musso a un tiro libre de Lucas Robertone, lo que quedó fue casi solamente tiempo para un par de errores arbitrales. Primero, en un manotazo que lejos estuvo de ser mal intencionado, Loustau echó a Brian Cufré para la visita. Y casi al final, fue Leonardo Sigali el que vio la roja directa por una supuesta patada violenta que pareció no existir. Así fue como Racing se fue con la victoria, aunque con dos suspendidos para la próxima fecha.
Los planes de los entrenadores se alteraron rápidamente. Ya a los 5 minutos, Nery Cardozo tiró un córner que encontró sólo a Martínez, y el delantero cabeceó esquinado para adelantar a la Academia en el marcador. Pese al gran arranque del jugador del momento del local, la figura lentamente sería Juan Musso, el arquero.
Firme y consistente, Musso fue apagando situaciones de gol del rival. Le atajó un par de tiros a Zárate en la etapa inicial, así como un potente cabezazo de Fabián Cubero y un tiro bajo y esquinado de Matías Vargas. Sin embargo, no llegaría al 100% de efectividad.
Cuando en el complemento Racing parecía estar dispuesto a retomar el control, Vargas ubicó con un gran centro la cabeza de Zárate, y el delantero puso el empate batiendo la resistencia de un arquero que incluso casi logra forzar un córner. Nicolás Domínguez casi pone el segundo minutos después, pero serían las rojas lo que desvirtuaría el encuentro.
Una pelota peleada por Lisandro López y Hernán De La Fuente derivó en que el 9 le tirara una patada sin pelota al defensor que estaba en el piso. La reacción estuvo lejos de ser otra agresión de ese estilo, aunque fue con bronca. Y por eso Patricio Loustau decidió echar a los dos. Posterior a eso, Centurión aprovechó una de las pocas situaciones de peligro que se dieron con ambos conjuntos ya fijandose más en el arbitraje, y pudo poner el 2-1 de cabeza.
Después de una enorme atajada de Musso a un tiro libre de Lucas Robertone, lo que quedó fue casi solamente tiempo para un par de errores arbitrales. Primero, en un manotazo que lejos estuvo de ser mal intencionado, Loustau echó a Brian Cufré para la visita. Y casi al final, fue Leonardo Sigali el que vio la roja directa por una supuesta patada violenta que pareció no existir. Así fue como Racing se fue con la victoria, aunque con dos suspendidos para la próxima fecha.