La casa del Cavallino Rampante tiene mucho que festejar. La sorpresa en el Albert Park de Melbourne no sólo desató la alegría de los tifosi, sino que fue un cachetazo para los representantes del equipo alemán campeón del mundo. Con la ayuda de un auto de seguridad virtual y de una atinada parada, vio cómo su rival eterno se alzaba con el trofeo de ganador. Si el año arranca así, hay promesa de pelea en lo más alto.

Tras chicanas y chistes, el panorama de cara a la gran final en suelo australiano se había teñido de rojo y plata. Ferrari y Mercedes, con Vettel y Lewis Hamilton calentando la previa con duras declaraciones decoradas con ironía y gracia, prometieron dar espectáculo, y cumplieron. El primer capítulo pasó luego de la clasificación, donde las acusaciones de implemento de distintos mapeos de motor estuvieron al orden del día. Pero, la sonrisa al terminar la carrera se imprimió en el box del equipo italiano, pero la fortuna también la fortuna estuvo presente en una buena cantidad en favor de los italianos.

Mercedes cumplió con la parte que estaba obligado a hacer: con un auto veloz y largando desde la pole, el británico dominó las vueltas iniciales de la competencia, y estableció una brecha tranquilizadora. Vettel hasta entonces no había logrado salir de la tercera ubicación, un puesto por detrás de su compañero, Kimi Raikkonen. Pero entre los giros 23 y 25, las unidades Haas de Kevin Magnussen y de Romain Grosjean quedaron fuera de la exigencia y provocaron el ingreso del auto de seguridad virtual. Fue allí en donde el trámite dio un vuelco de 180 grados: el alemán se encontraba en la cima, pero todavía con un ingreso a los pits pendiente para hacer el cambio de neumáticos. Aprovechando el régimen de seguridad mientras se limpiaba la pista, Vettel pasó por la línea de boxes y echó por tierra todas las chances de sus perseguidores. "Tuvimos un poco de suerte, y esa fue la llave de la victoria", reconoció el flamante ganador.

Por otro lado, hubo varios puntos altos en otros pilotos. El local, Daniel Ricciardo, finalizó cuarto con su Red Bull, mientras que el cambio de unidad de potencia en el esquema de McLaren devolvió a Fernando Alonso a los puestos de avanzada. El español arribó quinto y desplazó a la sexta posición a Max Verstappen.

Así Vettel coronó su podio número 100 en 200 presentaciones en la Fórmula Uno, y ya está al mando de la tabla general. Es el líder con 25 puntos, siete más que Hamilton, que sufrió la maldición de Australia ya que sólo dos veces se conoció la gloria largando desde la pole en las últimas ocho carreras. La próxima fecha será el el 8 de abril en Bahrein.