La expectativa que habían despertado los pilotos en la apertura de la temporada se fue apagando y aún no pueden terminar de acomodarse de buena manera en la categoría. Si bien ambos tuvieron una sobresaliente actuación en la jornada clasificatoria del sábado, esto no se tradujo en las carreras posteriores.

En la competencia de apertura, en la que se parte con los primeros 10 puestos de la grilla invertidos, los argentinos pudieron avanzar. Girolami, alcanzó la tercera posición, pero en la última vuelta fue superado por y quedó relegado al cuarto lugar. Mientras que Guerrieri, pasó de octavo a sexto.

La carrera fue ganada por Tiago Monteiro con Honda. El podio lo completaron Tom Chilton y Robert Huff.

Pero en la segunda exigencia del día en donde los problemas complicaron a los argentinos. En la primera vuelta, Girolami sufrió un toque y tuvo que abandonar prematuramente. El piloto de Isla Verde fue embestido de forma involuntaria por su compañero de equipo, quien a su vez sufrió un golpe provocado por Huff. Por su parte, Guerrieri se fue para atrás en la largada. Inició en el tercer cajón de salida y terminó nuevamente en el sexto puesto. Su Chevrolet Cruze no le dio la posibilidad de recuperar frente a autos más eficientes.

La prueba que otorga más unidades fue ganada por el marroquí Mehdi Bennani. Seguido por Nick Catsburg y Chilton, de gran actuación en Hungría.

Con este panorama, el líder del campeonato es Monteiro con 123 puntos, y la próxima fecha será en el mítico Nürburgring Nordschleife, en Alemania. Así, los pilotos argentinos tendrán dos semanas para ajustar detalles y afrontar el resto de la temporada con el objetivo de ser más competitivos.