El envión que generó la victoria contra Lanús en la jornada de los clásicos no fue suficiente para mantener la racha. Frenado en seco por un equipo que planteó bien el partido, Banfield se fue con las manos vacías y dejó escapar la oportunidad de recortar distancias con la cima del torneo.

Los de Falcioni no hicieron un buen partido. En defensa, sintieron la ausencia de Carlos Matheu -quien fue expulsado el sábado contra el Grana-, y mostraron falencias y desacoples que permitieron al local romper la última línea para enfrentarse contra Hilario Navarro. Mientras que la falta de creatividad y eficiencia en ataque, alejó al Taladro de sus rendimientos destacados que lució en la reanudación de la temporada.

Pocas jugadas de riesgo tuvieron lugar en la primera mitad. En un trámite parejo y disputado, los tucumanos aprovecharon el buen presente de sus mediocampistas y le robaron la iniciativa que había adoptado la visita. A los 37, Favio Álvarez rompió por entre medio de los centrales y recibió la habilitación de Luis Rodríguez. Mano a mano con el arquero, solo le quedó eludirlo y definir en soledad, para la alegría de su hinchada.

El complemento halló a los locales estirando la ventaja. A los 5 minutos de la reanudación, Leandro González ensayó una gran jugada, en la que dejó desairado a su marcador en el área y definió con un fuerte y ajustado remate para sellar el 2-0. A partir de ahí, el Decano manejó con tranquilidad el encuentro, mientras que Banfield fue un manojo de nervios, que no encontró la claridad para descontar.

La goleada se consumó con el penal que el árbitro, Silvio Trucco, cobró, tras la mano de Martín Lucero. Una contundente definición de David Barbona dejó parado al arquero, que nada pudo hacer para evitar la caída de su valla. "Tenemos nuestro carácter y en los partidos difíciles lo demostramos", marcó Álvarez al concluir el partido, en referencia a la actitud del plantel frente a la exigencia de la doble competencia.

Así, Banfield quedó con 45 unidades y no pudo recortar con la punta, aunque todavía planea cerrar una buena campaña. Temperley será su próximo rival. Por el lado de Atlético Tucumán, con 31 puntos se ubica lejos en el torneo, pero el objetivo cercano lo ubica en Brasil, ya que enfrentará el miércoles 24 de mayo al Palmeiras, pensando en la clasificación y escribir la página más importante de su historia. En el torneo doméstico su siguiente escollo será Talleres de Córdoba.