Escándalo, goleada, venganza, humillación, récord e histórico, son alguna de las cosas de las que se habla tras el abultado 8-0 con el que River superó como local a Jorge Wilstermann por el encuentro correspondiente a los cuartos de final de vuelta de la Copa Libertadores y clasificó a semifinales por un global de 8-3.

El partido fue de principio a fin controlado por el Millonario que fue muy superior a su rival y se apoyó en el gol y el plateo de ambos conjuntos para agrandarse y arriesgarse aún más. Con mucha presión desde la salida y mucha precisión en el comienzo, el local logro empatar el global en tan solo 20 minutos, para ya a los 36 revertir el resultado y lograr una confianza y juego que lo llevarían a lograr la goleada que finalmente se dio.

Durante el inicio se comenzaba a ver un equipo argentino superior a sus rivales, sin embargo los bolivianos parecían plantarse bien atrás con una línea de 5 y un equipo armado para salir rápido en las contras en búsqueda de un gol de visitante que matará todo esperanza. Pero este marco cambiaría radicalmente a los 9 minutos, tras un gran pase en cortada de Leonardo Ponzio, que tomaría Ignacio Scocco dejando en el camino primero a 2 defensores y luego al arquero para definir tranquilo frente a un arco vació.

A partir del primer gol los visitantes se cayeron y los dirigidos por Marcelo Gallardo lo aprovecharon. A los 14 minutos Scocco marcó el 2-0 con un remate furioso tras un centro pasado de Carlos Auzqui que dejó desconcertados a todos los defensores. Un minuto más tarde se lesionó el defensor boliviano Juan Pablo Aponte y el técnico Roberto Mosquera aprovechó para cambiar de estrategia buscando el gol de visitante, sin embargo 4 minutos más tarde llegaba el 3-0 parcial, con otro gol de Scocco, esta vez casi de casualidad con un centro buscapié que terminó ingresando gracias a la gran rosca que metió el delantero.

Tras el empate global transitorio, el Millonario se relajo algo y bajo un poco el ritmo, pese a ello siguió siendo superior a su rival y con Scocco, esta vez como asistidor, llegó al cuarto. El goleador en esta oportunidad fue Enzo Pérez, que tras un gran pase la picó frente a la salida del arquero Raúl Olivares. Otro gol, se revertía el resultado general y con esta tranquilidad en el equipo argentino se iba al descanso.

Ya en la segunda mitad cuando los punteros del torneo boliviano se esperanzaban con un gol que los vuelva a meter en partido, el local volvía a golpear. Con solo 30 segundo de la segunda mitad ya llegaba el quinto, este fue nuevamente obra de Nacho Scocco luego de una gran jugada colectiva que finalizó con un centro atrás de Gonzalo Montiel . Solo 8 minutos más tarde llegaría el sexto en una jugada casi calcada que sería arruinada por un defensor que la llegó a desviar pero que terminaría concretando el otro Nacho, Fernández.

Pasaron 5 minutos antes del 7-0, otra vez el tanto fue obra de Scocco, esta vez capturando un rebote en el área chica tras un tiro de esquina que fue desviado por el joven Montiel casi en el primer palo. El último tanto llegó a los 67, con una corrida fantástica, casi de área a área de Enzo Pérez, que terminó definiendo nuevamente por encima del portero Olivares. Tras este gol llegaron los cambios de Gallardo y el equipo bajó un poco la intensidad, fue por ello que pese a seguir siendo el dominador absoluto del partido, no logró marcar más goles.

Con este resultado River llega a semifinales donde enfrentará al ganador San Lorenzo vs Lanús, que tras el 2-0 a favor del Cuervo en el partido de ida jugarán en instantes la revancha. Ya en una hipotética final los de Marcelo Gallardo enfrentaría a Gremio de Porto Alegre o Barcelona de Guayaquil.