18:11
Compartir
jueves 21 de junio de 2018

Un planteo improvisado y con errores

La caída de la Selección Argentina 3-0 ante Croacia tuvo apuestas que fallaron tanto en individualidades, en la táctica colectiva y los cambios. Línea de Fondo te trae un análisis de cómo salió el plan de Sampaoli.

Una desilusionante derrota de la Selección Argentina 3-0 ante Croacia y la chance latente de la eliminación en fase de grupos, algo que no pasa desde 2002, trae consigo críticas por doquier. Por eso, analizamos el planteo táctico de Jorge Sampaoli, con sus intenciones y sus errores que fueron una parte del motivo de esta goleada.


En la previa, ya se sabía que el equipo que iba a parar el técnico iba a ser casi una improvisación, por el poco tiempo que hubo para entrenar el sistema. Y eso se notó en la cancha desde el minuto uno. Además, Enzo Pérez pasó, en cuestión de un par de semanas, de no estar convocado a ser titular en el duelo más difícil del grupo D.


Nicolás Tagliafico, Nicolás Otamendi y Gabriel Mercado conformaron una línea de tres -algo que le agrada al cuerpo técnico-, mientras que Eduardo Salvio y Marcos Acuña jugaban por los costados teniendo que hacer toda la banda. Pérez junto con Maximiliano Meza poblaban el mediocampo, con Lionel Messi como objetivo para generar situaciones de peligro, y Sergio Agüero como el delantero que completaba la formación.


Los primeros errores, producto de falta de trabajo, se vieron en el primer tiempo. Centrales que se abrían y no recibían ayuda en el retroceso, volantes centrales que no encontraban su lugar en la cancha, un Messi inconexo y un equipo que apostaba a atacar por las bandas, pero que con el correr de los minutos lo hacía cada vez con más inferioridad numérica.



Ya promediando la etapa inicial, volvieron a aparecer los errores en las salidas, y en alguna situación esporádica la Argentina pudo estar al frente. Pero Croacia, que primero buscó contener a su rival y después se fue animando, fue aproximándose hasta el gol inicial.


Con la desventaja en el marcador, llegaron los cambios que no fueron para ajustar el sistema que no estaba funcionando, sino para apostar a las individualidades que no estaban siendo la solución. Primero cambió a Sergio Agüero por Gonzalo Higuaín, reemplazando nombres en una posición que nunca tuvo protagonismo. Y luego, con el 2-0, Cristian Pavón fue una búsqueda de encontrar un revulsivo pero chocó ante varios defensores, por la falta de asociaciones como equipo.


Hay decisiones que generan muchas preguntas. La Argentina jugó con 3 defensores, algo que resultó toda una novedad, y falló por falta de trabajo. Enzo Pérez fue titular cuando no formaba parte de la lista de 23 jugadores inicial, lo que muestra que no hay volantes indiscutidos hoy en día. Y sobre el final, Paulo Dybala ingresó después de haber sido prácticamente borrado de la Selección por no haber formado una sociedad con Messi.


Aún en este escenario desalentador, todavía hay chances de clasificar. Para ello, la Argentina deberá buscar recuperarse no sólo anímicamente sino también desde el juego, para buscar una victoria ante Nigeria e implorar por que los resultados acompañen.