En un duelo clave para alimentar sus aspiraciones de mantener la categoría, Patronato hizo pie en su casa para adueñarse de tres puntos importantes. Le sacó provecho a la fecha 21 ya que capitalizó el empate de San Martín de San Juan en el clásico cuyano y lo metió en el grupo de los cuatro que hoy estaría cayendo a la B Nacional.

Con más urgencia que juego, con más empuje que ideas, Patronato se hizo fuerte en su estadio para engrosar su promedio y levantar la cabeza. Le alcanzó con poco frente al Huracán de Mohamed, que poco pudo hacer para revertir su mal momento futbolístico. Los de Parque Patricios no estuvieron finos y registraron su segundo tropiezo seguido.

Tras un primer tiempo en el que poco riesgo hubo en las áreas, apeas algunos remates lejanos incomodaron a las defensas, la acción fuerte estuvo en el complemento. A los 10 minutos de la segunda mitad Bravo apareció sin marca en un córner para meterle un cabezazo al gol. El ex Boca desniveló y dejó sin chaces a Antony Silva para festejar su estreno goleador con la camiseta del Patrón.

La ventaja mareó a su rival, que lo único que atinó a hacer fue tirar centros para que se luciera Sebastián Bértoli. El veterano arquero tuvo una actuación estelar sobre la hora al ser el protagonista de una doble tapada y le quitó la oportunidad de empatar a los de Mohamed. Sobre el tiempo adicionado, Lucas Barrios vio la roja, algo que es más que un dolor de cabeza para el elenco quemero, ya que enfrentará a San Martín de Tucumán en la próxima jornada. Desde la reanudación que no gana y ya acumula cinco fechas sin éxitos.

El alivio llegó a Paraná: con 87 puntos el equipo de Mario Sciacqua quedó momentáneamente afuera de la zona de descenso y se aferra a su ilusión de quedarse en la elite del fútbol argentino. En el capítulo 22 de la Superliga tendrá un duelo especial ya que se verá las caras con Belgrano, uno de los que puja para escaparle al fondo.